La Unidad de Formación Continuada de Enfermería del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla ha reacreditado su calidad como Centro de Formación Continuada de las Profesiones Sanitarias, cinco años después de haber conseguido la primera acreditación de este tipo y establecido nuevas mejoras para propiciar que los profesionales adquieran y desarrollen un conocimiento actualizado que puedan aplicar en su puesto de trabajo, consiguiendo una mejora continua de la atención y cuidados que prestan a los pacientes. 

Esta Unidad es la entidad encargada de gestionar el plan de formación continuada de todo el personal adscrito al área de Enfermería, es decir, más de 3.000 profesionales enfermeras, auxiliares de enfermería y técnicos de distintas disciplinas que trabajan en el Hospital.

En los últimos años, ha experimentado un crecimiento de las plazas de formación ofertadas -más del triple en el año 2021 que en 2017-, que ha ido acompañado de un incremento en su diversidad tanto en cuestión de formatos (presencial, virtual e híbrido), como en metodologías docentes. 

Además, el equipo de la Unidad de Formación de Enfermería se ha formado en este tiempo como proveedor y evaluador de la CFC, lo que le ha permitido conocer con mucha más profundidad esta metodología de trabajo, que aplica ya a sus acciones formativas con el objetivo de que cumplan los requisitos para ser consideradas en la Carrera Profesional Sanitaria.

Así, del 2018 a 2022 inclusive se realizaron 911 acciones formativas, 718 de ellas acreditadas, en las que han participado un total de 76.084 profesionales. Unas cifras muy importantes, teniendo en cuenta, además, que en este período de cinco años desde la anterior acreditación la Unidad ha tenido que continuar con su actividad a pesar de las restricciones impuestas por el COVID-19 y el lógico menor tiempo disponible por parte de los profesionales en aras a atender la emergencia sanitaria.

De hecho, durante esta crisis, la Unidad de Formación Continuada de Enfermería jugó un papel fundamental colaborando en el despliegue del plan de seguridad del Hospital, en el que se incluyó la formación intensiva en el uso de EPIs para cerca de 2.000 profesionales en los primeros 15 días tras el estallido de la pandemia, en colaboración con los servicios de Prevención de Riesgos Laborales y Medicina Preventiva del Hospital.